miércoles, 26 de octubre de 2011

EL SIMPLÍSIMO POLÍTICO


POR: IVÁN DELGADO MARTÍNEZ

Me parece explicable, aunque nunca justificable, que elementos de tendencia de derecha, que acremente cuestionan al gobierno de la Revolución Ciudadana, expresen puntos de vistas en contrario por ajaspajas, por supuesto con la finalidad de inestabilizar al sistema democràtico participativo que lleva a cabo Revoluciòn Ciudadana en perspectiva de construir la autèntica patria nueva.

Esta tendencia ha sido la tónica de las organizaciones políticas anti progreso, las logias empresariales, los mass-media, los grupos económicos y demás "think tanks" que hacen el trabajo disociador para frenar el ritmo de los cambios y el inexorable camino hacia el progreso, mentalizado e impulsado por corrientes modernas de una tendencia política dispuesta a provocar los cambios necesarios, posibles y revolucionarios en beneficio, sobre todo, de los eternos postergados de la patria.

Pero nadie entiende que partidos y agrupaciones llamadas de izquierda, intelectuales progresistas (por lo menos asì se han definido), dirigentes sociales y académicos ciertamente conocidos y reputados, cuestionen visceralmente a la Revolución Ciudadana, a sus líderes y al socialismo del siglo XXI con un simplismo ordinario, conociendo, supongo, los presupuestos teòricos de una corriente ideológico-filosófica puesta para el debate y la discusión civilizada.


Esto del debate abierto y la teorización permanente (acompañada de movilización consciente), que debe ser condición "sine qua non" para entender los procesos políticos, parece han sido soslayado ex profeso porque a gran parte de los políticos "pragmáticos" no les interesa el debate de ideas y principios; y, cuando más, se conforman con leer algùn manual de procedimientos a alguna cartilla de instrucciones (verdaderas grageas homeopáticas) para edulcorar las mentiras diligentemente repetidas.

Estamos, por tanto, frente a un reto histórico que debemos asumir todos, y sobre todo aquellos que creemos en el cambio profundo de las estructuras caducas, para construir una nueva sociedad embellecida por la solidaridad y demás valores éticos. Únicamente así podemos, de consuno, edificar la Patria Grande (NUESTRA AMÉRICA) para todos los indoamericanos que hemos soportado siglos de miseria, postergación y desengaño.

Portoviejo, 10 de octubre de 2011

miércoles, 12 de octubre de 2011

LA DERROTA DE LA DERECHA

 
POR: IVÀN DELGADO MARTÌNEZ
 

Estamos esperando que la oposición tenga la sensatez de reconocer que obtuvo otra derrota en la Asamblea Nacional y que el gobierno no llegó a recurrir, puesto que no es su estilo, a las viejas pràcticas de la polìtica clientelar como es la compra de conciencia como en el pasado.

Si así lo han hecho, es de entender que están en la intención de construir nuevas formas de ejercer la política, para que la democracia se fortalezca en base al debate inteligente y la confrontaciòn polìtica civilizada, desde posiciones ideològicas contrapuestas y no por el apetito de captar el poder por ambiciones inconfesados o
determinados por el odio enfermizo de quienes son malos perdedores.

Es hora que los opositores de la revolución ciudadana se den cuenta que es mal negocio recurrir al atajo de la calumnia, la mentira y el ataque personal para defender intereses mezquinos. La polìtica debe enaltecer a los que la ejercitan y no la degradación como ha venido aconteciendo a lo largo de la historia producto del viejo pacto oligàrquico.

Siendo así, no sería entonces ùnicamente un problema entre la  derecha o izquierda, sino producto de la  madurez entre personas que buscan el bien comùn, desde posiciones contrarias pero basados en principios éticos. Esto nos permiten saber si lo que propone el uno y el otro tiene validez para los que estamos en el Estado llano y no tengamos que ver las maniobras dolosas para seguir reeditando los viejos vicios de la política clientelar que inmovilizan a la naciòn.

Felizmente se han superado, en parte, viejos atavismos dogmàticos  con la inauguraciòn de un nuevo pacto social, donde la ciudadanìa expresa, con claridad y transparencia, lo que piensa y siente sin el miedo de que los dueños del país objeten sus puntos de vista y obliguen a aceptar asuntos que terminan con sus sueños y esperanzas.

Las escaramuzas por el control de la Asamblea, que estàn encaminadas al control del Estado para restaurar la vieja polìtica del amarre y el atraco, fueron superadas y es de esperar que los derrotados y complotados se allanen al mandato del pueblo en las urnas que exige la aprobación, por ejemplo, de una ley de comunicaciòn que permita la verdadera libertad de expresiòn para acabar con el terrorismo mediàtico.
 

lunes, 3 de octubre de 2011

LOS USUARIOS DE REDES SOCIALES


POR:

IVÀN DELGADO MARTÌNEZ

He intervenido en la red social facebook ex profeso, con la finalidad de tratar de entender el  comportamiento sociológico de un segmento muy pequeño de la población (especialmente la juventud), probablemente un 10% que accede al Internet y que, en su mayoría, corresponden a sectores medios, medio altos y altos que están en capacidad costear está tecnología de punta.

Mi experiencia como "investigador" laico, es decir nada académico y tampoco profesional, me llevó a concluir que esta red, al igual que otras, está dedicada a las más elementales banalidades y usos subalternos, y un sector reducido a temas más "serios" como la política y otros menesteres, bajo el estímulo de ciertos políticos deshonestos, periodistas indecorosos y profesionales ingenuos e irascibles que hacen uso indebido de esta herramienta.

Todos ellos bajo el influjo de estereotipos mass-mediáticos recurren a la emocionalidad irracional para en la simplicidad argumental, hacer creer que, por ejemplo, el Che Guevara es fue un criminal sanguinario, Salvado Allende un dictador comunista, a pesar que fue derrocado por un tirano sanguinario; Fidel Castro es el "Caín de América", que Correa es un tirano, ladrón e irresponsable, que la revolución ciudadana es un plan estatizador y que los seguidores del socialismo del siglo XXI somos unos fanáticos comunistas, aborregados por las lengua fosfórica y volcánico del líder del "socialismo carnívoro". Sin contar con los adjetivos hirientes y las cerdosas calumnias.

Pero no todo es malo, pernicioso y dañino, como muchos agoreros de la desolación y el desastre que pretenden sembrar dudas interesados por crear el desconcierto. He comprobado también que una parte importante de cibernautas opinan con sindéresis, patriotismo y responsabilidad ciudadana, porque tienen esperanza en el país, confianza en sus líderes (especialmente Correa) y la determinación de vivir en una democracia plena, que se anuncia  popular, participativa, deliberativa y sustentada en nuevos contenidos esenciales.
 Será una buena oportunidad provocar corrientes de opinión que ayuden a entender la política como una ciencia social (la politología) que promueva el debate de ideas sin llegar a la agresión y descalificación inútil. También es pertinente comprometerse a investigar el fenómeno social para evitar la  improvisación y la propalación de ideas alejadas del rigor histórico, político e ideológico para elevar el tono del debate y la difusión de principios.