viernes, 7 de mayo de 2010

EL PLANTÓN DE CARLITOS

Por: 
Iván Delgado Martínez.

Por su loco afán de protagonismo y debido a su ego de tamaño colosal, la actitud incoherente de Carlitos Vera es inversamente proporcional a su odio cerril contra el Presidente Correa que ningún daño personal le ha ocasionado; salvo catalogarlo -igual como lo ha hecho con E. Palacio y J. Ortiz- de rabioso "pitufo" de los mass-media, que sirve incondicionalmente al "SICARIATO DE LA TINTA Y LA PALABRA".



El "CON CERO TOLERANCIA" se había convertido en un ponsoñozo como intemperante "incomunicador social", que sue le -aseguran sus allegados y conocidos- cual narciso verse y oirse en la soledad de la alcoba, atacado por el complejo de Onán. Esta suerte de masturbación intelectual que ritualizaba el periodista estrella, el inefable Carlitos Vera, la replicaba noche a noche y fue la razón para que los directivos de la TV lo separarán del programa, porque ya no separaba la realidad de la ficción. 



Ahora deambula "regando su semilla" por los caminos de la patria, montado en su Rocín plateado 4X4, esparciendo veneno a diestra y siniestra que le sale por todos los huecos de su cuerpo, hasta por aquel situado "donde la espalda -co mo dijo Carlos J. Arosemena- pierde su honrozo nombre".

Carlos Vera, ciertamente por su comportamiento esquizotímico es tenaz, terco, intemperante, vilioso y "termocéfalo", capaz de las ideas y actitudes más descabelladas como pretender, no obstante sus limitaciones intelectuales, de liderazgo, éticos, etc. erigirse en el contradictor del Presidente Correa que lo mira con mucha conmiseración.


En este momento (jueves 6 de mayo del 2010, 18h00) está realizando un desesperadísimo plantón de protesta a lo mero macho, por que él es 100% bahieño, (ejerciendo la democracia tumultuaria, si es que convoca algunos centenares de descontentos) para reclamar no se qué ni cuántas cosas que ni el mismo las cree y las entiende; sólo estimulado por su afiebrado odio, su acrimonia sin nombre y respalda do por los que financian o costean sus periplos de odio y de venganza. 

Carlitos Vera no se da cuenta que está haciendo el ridículo al pretender liderar la oposición sobre presupuestos teorico-político sin fundamento. No alcanza a comprender que la oligarquía y los poderes invisibles lo utiliza como animador de la próxima contienda electoral, a la manera de partido prelimimar esperando el juego de fonda que es lo que les interesa.