martes, 30 de noviembre de 2010

Contra el sicariato de la prensa

Por:
IVÁN DELGADO MARTÍNEZ

Las empresas transnacionales de la información, los poderosos dueños de medios y los dóciles periodistas al servicio del poder económico que están atentos al chasquido de los dedos del amo, emprenden una campaña supuestamente en defensa al derecho de la opinión y de la libertad de prensa, bajo el peregrino argumento de que el Gobierno y ciertos comunicadores ad hoc se han dedicado a la cruzada de descrédito y de ataque despiadado contra los medios, que dicen cumplen con el rol cívico y patriótico que le encomienda la sociedad.

Dicen, sueltos de lengua y ligeros de pensamiento, que para lograr este objetivo se esta utilizando redes sociales como facebook,  twitter y los correos electrónicos a placer, dizque para desacreditar a la sacrosanta libertad de prensa que, como todos sabemos, en realidad no es así; puesto que, como afirma Federico Fasano, Director General de Le Monde Diplomatique, todos sabemos que la "LIBERTAD DE PRENSA, CONVERTIDA EN LIBERTAD DE EMPRESA, SE HA APROPIADO PRIVADAMENTE DE LA INFORMACIÓN, QUE ES UN BIEN COMÚN DE LA HUMANIDAD".

Al apropiare de ese bien común, derecho de la humanidad, para ponerlo al servicio de las transnacionales, de las oligarquías y de los poderes fácticos también llamados poderes invisibles, cierta prensa entreguista y apátrida termina siendo, como afirma Enrique Guinsberg, Secretario de Redacción de Le Monde Diplomatique en Español, parte de esa actividad dudosa donde "LOS MEDIOS SE HAN CONVERTIDO, PARA MUCHOS ANALISTAS, EN EL APARATO SOCIALIZADOR HEGEMÓNICO, POR LO CUAL ES UNA NECESIDAD EL ESTUDIO DE SU APORTE A LA ESTRUCTURACIÓN DEL SUJETO SOCIAL, ES DECIR, A LA CONFORMACIÓN DEL "HOMBRE NECESARIO" PARA EL MANTENIMIENTO Y REPRODUCCIÓN DE LOS SISTEMAS DE DOMINACIÓN"

No es cierto, entonces, que el derecho ciudadano de utilizar las nuevas tecnologías comunicacionales como el e-mail y otras para conectarse e interactuar, frente a la censura grosera y montaraz de ciertos medios, es atentar y conspirar en contra de la labor, muchas veces perversa, de medios abiertamente convertidos en sucedáneos de la corrupta partidocracia, para denostar y combatir al Gobierno de la Revolución Ciudadana por ajaspajas.

Por lo demás, es importante recordar que fueron los propios medios los que desataron la guerra mediática contra el Gobierno y el Socialismo del Siglo XXI, al sentir que éste (el Gobierno) lesionaba sus intereses y sus prerrogativas. El Gobierno lo que ha hecho es responder con inteligencia, habilidad y entereza la campaña agresiva de los medios que comenzó con !MÁS RESPETO! y continúa con el abierto "SICARIATO DE LA TINTA Y LA PALABRA", como lo asevera el presidente Correa.